Sé fuerte.

Todos sabemos firmemente que ésta causa no es de amantes de los animales, es de personas (que como cualquiér otro grupo que protege y ayuda a grupos sociales vulnerables), son concientes de que el matar, torurar y no ayudar a un ser indefenso está MAL; es decir, no se necesita que te gusten las ratas, para saber que está mal matarlas. Tristemente existe un fanatismo dentro del movimiento (que incluso me ha pasado a mi) en que no permiten la ayuda de alguien, ignoran o lo tachan de "hipócrita" por no ser vegetariano/vegano, por que aún usa zapatos o cinturón de piel o por que no tiene animales en casa; vamos a recordar que un 90% de los involucrados se hicieron veg. en su transcurso y no lo son de nacimiento, que desecharon sus artículos de piel, que tardaron en informarse qué marcas testan en animales. Y me refiero a esto como una froma de reflexión, dejémonos de hipocresía, egoísmo y apoyemos a esas personas que viejas o jóvenes quieren aportar ( que hace falta) a la causa.
Hace un par de dias me tocó ver un momento horrible en una avenida rápida, la vida de un gatito estába en juego; una chavita protectora ( que no es vegetariana) se lanzó arriesgando su propia vida para salvar la del gato. Su acto inconciente o valiente (como quieran verlo) mostró el amor y ganas de ayudar a estos seres, y ahora la admiro.

Por otro lado y pienso yo es muy triste, he llegado al punto de creer que debemos "investigar" muy bien a quién apoyamos, con quién trabajamos y para qué; podrán decirme que eso no importa, lo importante es ayudar, efectívamente, no hay que catalogar ni criticar a quien vende productos como playeras, tazas, botones, o a aquellas organizaciones que núnca las verás trabajando con otras, lo importante es ver si efectivamente ese "egoismo" o esa "vendimia" dá frutos.
Ahora, a muchos les molesta que exista una "jerarquía", por que si álguien logra algo o álguien es presidente, director o encargado de un campaña, lo tachamos como protagonista, sin embargo, en toda buena organización de grupo, es necesaria una jerarquía; debemos conocernos bien para saber en qué somos mejores ( yo por ejemplo soy pésimo en adopciones), no sentirnos menos por solo ser "voluntarios", todo lo contrario, sin nosotros voluntarios los "lideres" no son NADA; esto es como un árbol: sin raices, no lo es, sin tronco, no lo es, sin hojas, no lo es. Pero también es cierto que existe el protagonismo, y muy fuerte, que no tiene nada que ver con fotos, con popularidad, con dinero; el protagonista animalista, creo yo, es aquél que quiere estar en todo, y núnca se vé esa ayuda, que se dá a conocer como un fregón, pero que incluso aquél protector que no tiene Facebook, ha hecho cosas tremendamente más grandes que él; para nada tiene que ver si rescata o no animales; como les decía hay unos que son buenérrimos para rescatar, otros para conseguir hogares, unos más para campañas de concientización, hablar en público; o qué me dicen de los que dan dinero, pero eso si, a esos que dan dinero ( aun que no sean veg. o no rescaten perros) los idolatrámos y admiramos su ayuda, pues si, por que es necesaria,necesitamos de todos.

Tenemos que saber cómo trabajamos nosotros, qué nos ha funcionado y qué no, qué se necesita, en dónde se necesita; no podemos llegar cantando un Ave María con velas y folletitos a una Plaza, en donde estámos escuchando un Olé a un animal al que están torturando, mucho menos en México con una idiosincrasia meramente machista, racista, sexista e indiferente. Es cierto, la violencia solo genera más violencia, no es lo mismo ser radical que ser violento, y no es lo mismo "violento" ( aquel que grita asesino) a "violento" aquél que golpea a alguien; no confundamos las cosas.
Creo yo, que con la situación que se tiene en México, con la sociedad en la que vivimos y con los pocos cambios que se han logrado, es necesario aplicar ambas cosas, bien armadas y estructuradas, lograrán su objetivo. Pero eso depende ya de cada quien, solo por favor! dejense de malos comentarios, chismes y malos adjetivos a aquellos que dicen grocerías, a quellos que se roban animales, o a aquellos que prefieren rezar para que esto acabe. Somos libres de pensamiento.